Destruccion del Complejo Arqueologico por un grupo de personas con una retroexcavadora, se arrojo basura y prendio fuego, la acción fue intervenida por la policia.
Ruinas arqueológicas de Colcapirhua, Sipe Sipe, Quillacollo, Colomi y de Vinto descuidados y la inconclusión de construcción del museo impulsan otro tipo de usos: asentamientos urbanos, estación policial y presencia de indigentes.
En las localidades Huachacalla y Pisiga, se identificó y preservo 37 sitios arqueológicos (áreas habitacionales con deterioro y caminos prehispánicos) a cargo de la estatal Administradora Boliviana de Carreteras ABC.
Comunarios de Copacabana reclaman amenaza de destrucción de terreno donde se encuentra la necrópolis de Cundisa (cultura tiwanakota) por la construcción de un mercado donde no se encuentra registro, planos y piezas arqueológicas.